El Ministerio de Salud de las Hermanas del Buen Socorro

Las Hermanas del Buen Socorro se fundaron con un llamado a sanar durante los tiempos revolucionarios en Francia, cuando había pobreza generalizada y condiciones insalubres, y muchos no confiaban en los hospitales para atenderlos. Doce mujeres jóvenes cuidaron de los pobres, los enfermos y los moribundos quedándose en sus hogares hasta que se recuperaron o murieron. Esto era algo inaudito en una época en la que se esperaba que los religiosos permanecieran en sus claustros, especialmente por la noche. El carisma de Buen Socorro era brindar curación, compasión y liberación a los necesitados y ser una buena ayuda donde fuera necesario. Leer más sobre nuestra historia.

Las Hermanas del Buen Socorro responden a una necesidad universal: Dar a todos los que sufren una razón para vivir y una razón para esperar. Creemos profundamente en la curación de la persona en su totalidad. Esto significa que consideramos la salud física, mental y espiritual cuando cuidamos a las personas. Nuestra misión nos insta a conectarnos profundamente con otros mientras compartimos el ministerio sanador de Jesucristo. Abogamos por abordar las necesidades de salud pública antes de que conduzcan a condiciones más graves.

Hoy, apoyamos la salud de nuestras comunidades con hospitales, clínicas de salud, servicios de salud en el hogar, hospicios y programas comunitarios en todo el mundo. Las Hermanas del Buen Socorro son una de las congregaciones patrocinadoras de Bon Secours Mercy Health, que opera 60 hospitales en los Estados Unidos e Irlanda y brinda servicios comunitarios de salud y apoyo en las áreas a las que sirve.